El tercer capítulo ha desenterrado el afecto que sentía Obi-Wan Kenobi por Padmé Amidala, por lo que hay quien vuelve a preguntarse si el maestro Jedi estaba enamorado de ella.
Agencia Excélsior
Protagonizada por Ewan McGregor, la nueva serie de Star Wars, Obi-Wan Kenobi ha despertado, además de viejos y dolorosos recuerdos, uno de los momentos más emotivos para su protagonista. Y es que el tercer capítulo ha desenterrado el afecto que sentía por Padmé Amidala, el gran amor de Anakin, por lo que ya hay quien vuelve a preguntar si el maestro Jedi estaba profundamente enamorado del personaje encarnado por Natalie Portman.
La notable presencia de Darth Vader marcó la tercera entrega de la serie de Disney+ que, además de momentos épicos y oscuros, tuvo también espacio para la emoción y el sentimentalismo. Y sin duda, uno de los pasajes más emotivos fue en el que maestro Jedi recuerda sus días junto a Padmé, la madre de la princesa Leia.
Como los seguidores de Star Wars ya sabrán, después de rescatar de las garras de sus captores a la joven Organa en Daiyu, Obi-Wan le dice a la pequeña que le recuerda mucho a alguien de su pasado, tan terca e intrépida como ella.
Leia interpreta que Kenobi se refiere así a su madre, Padmé. En ese momento, le pregunta si él es su padre biológico a lo que él le responde: «Ojalá pudiera decir que lo soy, pero no, no lo soy”.
Y es que no son pocos los fans que se preguntan si, tras las palabras de Obi-Wan, no ocultará haber estado profundamente enamorado de Padmé. Sin embargo, nada más lejos de la realidad.
Aunque el maestro Jedi experimenta un sentimiento de anhelo y pérdida hacia la princesa y luego senadora de Naboo, a la que conocía casi desde que era una niña, es el recuerdo de su antigua amiga el que aflora en su interior al ver a su hija. No hay que olvidar que el maestro Jedi fue uno de los que mejor conocían en profundidad a la progenitora de Leia, pero siempre como su amigo y protector.
Y aunque lo que realmente desearía es poder ofrecerle a Leia una respuesta satisfactoria a todas las preguntas que asaltan a la joven sobre sus padres biológicos, Obi-Wan se ve incapaz de dársela.
Kenobi aún se culpa por la muerte de Amidala, lo que no es de extrañar, puesto que en parte se siente responsable de que Anakin abrazase por completo el reverso tenebroso. Más aún, cuando a punto de convertirse en un Sith, el joven empleó sus poderes contra su amada.
TRIÁNGULO AMOROSO DESCARTADO
Claro que no es la primera vez que surge esta cuestión entre los seguidores de la franquicia galáctica. Incluso una versión del guión del Episodio III iba a contar con un triángulo amoroso entre Anakin, Amidala y el mismísimo Obi-Wan Kenobi, pero finalmente se desechó esta posibilidad.
De haberse mantenido este interés amoroso de Kenobi por Padmé, hubiera dado más motivos a la actitud tan despectiva de Anakin hacia él durante todo el metraje de la cinta, más allá, claro está, de la manipulación a la que fue sometido por Palpatine.
La única otra persona por la que Kenobi podía tener algún tipo de interés romántico era la duquesa Satine Kryze, la gobernante de Mandalore durante las Guerras Clon, pero eligió a la Orden Jedi antes que a ella. A pesar de ello, aún seguían sintiendo algo el uno por el otro cuando Darth Maul la asesinó, lo que parece demostrar que nunca tuvo intención de mantener una relación sentimental con nadie más.