Falta una guía para próximas semanas y hay riesgo de deserción escolar, además de que fallan los protocolos para prevenir contagios, alertan activistas
Agencia Excélsior
A un mes de que concluya el ciclo escolar, los 24.5 millones de estudiantes de educación básica enfrentan un cierre sin planeación, ni guía para las siguientes semanas y sin protocolos, agua, ni infraestructura para prevenir contagios en algunas escuelas, en medio de la quinta ola de la pandemia de covid-19, acusó la organización Mexicanos Primero.
Además, advirtió que la medida de no reprobación dispuesta por la Secretaría de Educación Pública (SEP) es sólo una simulación que pone a los niños y niñas en mayor riesgo de desertar del sistema educativo más adelante.
Las autoridades fracasaron en este ciclo, no se puede transferir el enorme costo de la falta de aprendizaje a las escuelas para que resuelvan las horas que todavía le quedan al ciclo, tampoco a los docentes y familias, recortar los días del calendario y ponerles 6 de calificación es transferir el problema del rezago escolar, sin considerar que la garantía del derecho a aprender es en primer lugar del Estado. Con la corresponsabilidad de todas y todos, sí, pero con políticas públicas claras y enfocadas no a que todas y todos pasen de año, sino a que aprendan lo que necesitan”, indicó Laura Ramírez, directora de activación de Mexicanos Primero.
Se indicó que, si bien hay coincidencia con la SEP sobre el hecho de que es importante respetar los 180 días del ciclo escolar, es insuficiente el llamado que hace la secretaria Delfina Gómez a los estados para evitar el cierre anticipado, porque carece de opciones formativas para las y los estudiantes de educación básica una vez concluido el proceso administrativo de entrega de calificaciones y no se puede ir a la escuela sólo a “matar el tiempo”.
No existe un plan nacional para continuar con actividades de aprendizaje para las semanas de clase en el mes de julio, dejando a las escuelas a la deriva sin proyección ni planeación que permita mitigar los aprendizajes perdidos”, insistió.
Llamó a las autoridades federales para orientar con claridad a las y los docentes y directores escolares a fin de que durante las semanas que estarán en clases puedan dedicarse a dichas actividades de aprendizaje incluyendo reforzar temas rezagados de lectura y matemáticas, pero también a abrir la posibilidad a desarrollar actividades artísticas, deportivas y de habilidades básicas.
Respecto a la medida de no reprobación, expuso que aunque evita la repetición, de nada sirve tener una calificación aprobatoria si es sólo un número vacío que no tiene detrás ningún aprendizaje.