sábado, noviembre 23, 2024

Santiago Gamboa: letras para combatir la violencia

El escritor colombiano reflexiona desde la literatura en el daño que hace este flagelo a las emociones y los anhelos

Agencia Excélsior

La cultura cambia la realidad y sus tragedias en conocimiento; y el arte transforma la violencia y la crueldad de la vida en belleza. Por esta razón, afirma el escritor Santiago Gamboa, eligió la literatura, la novela negra, para hacer una radiografía de la violencia en su país natal que inspiró Colombian Psycho (Alfaguara).

Definida como un espacio de reflexión y una propuesta atípica, que incorpora un juego de autoficción en el que el autor es uno de los personajes, este título es el número 11 en la producción de largo aliento del novelista y cuentista.

En entrevista desde Italia, Gamboa explica que en Colombian Psycho “se ve cómo la sociedad colombiana está integrada sobre todo por gente de bien, que se levanta temprano, trabaja con honradez y paga impuestos, pero tiene que convivir con ese otro grupo minoritario que son los violentos, los corruptos, los crueles. Vemos a la gente buena metida en el mismo escenario que los sinvergüenzas, los bandidos, los asesinos”.

El narrador nacido en 1965 afirma que, además de hurgar en cómo daña la violencia a las emociones y los anhelos de los ciudadanos, le interesa abordar cómo las víctimas se vuelven victimarios, la evolución del uso de la tecnología en la tortura, el papel que los periodistas han tenido en la denuncia de estos flagelos y la relación de México y Colombia en materia de crimen organizado.

Es muy triste que el narcotráfico haya sido una de las herencias de Colombia a México. Las mafias mexicanas comenzaron siendo intermediarios para cruzar la frontera, pero,

desafortunadamente, se fueron convirtiendo en grandes cárteles y ahora son dueños del negocio. Incluso, en Colombia la cocaína ya es mexicana. El capitalismo mexicano siempre ha sido más poderoso que el colombiano”.

El también filólogo y ensayista admite que ambos países enfrentan “esa unión, ese problema, esa carga, esa lucha, que tiene que ver también con el olvido de regiones enteras, con la pobreza, la desigualdad, la concentración de la riqueza en las ciudades y el abandono del campo, con la corrupción. Todo esto genera más violencia y más crueldad”.

Recuerda que “hemos estado unidos por cosas bellas: los tres mejores escritores colombianos vivían en México: Álvaro Mutis, Gabriel García Márquez y Fernando Vallejo; hemos admirado la música mexicana, su cultura. Ahora también nos une la violencia, la crueldad y la muerte.

Y esos huesos que salen de la tierra reclamando justicia. Colombia es un país lleno de verde, pero esa superficie hermosa es una alfombra y, cuando la levantas, encuentras la otra historia del país”, agrega.

Para el autor de Páginas de vuelta (1995) y Será larga la noche (2019), “el periodista es el gran héroe en los dos países, porque es quien investiga sin tener una pistola ni entrenamiento militar para defenderse y, cuando el corrupto o el violento se sienten amenazados, simplemente lo asesinan”.

Gamboa concluye que “la violencia siembra violencia y el humanismo consiste en creer que la paz debe entonces sembrar paz”.