En ‘El Minuto que Cambió mi Destino’, Emilio Osorio reveló si las adicciones de su padre lo afectaron a nivel personal
Agencia Excélsior
El productor Juan Osorio vivió duros momentos como una persona adicta a las drogas, los cuales también impactaron a su hijo Emilio Osorio, fruto de su relación con la vedette Niurka.
En ‘El Minuto que Cambió mi Destino’, el joven actor relata cómo percibió las adicciones de su padre y si él mismo ha sido tentado a entrar al mundo de las sustancias.
«No cualquiera se levanta de un momento tan oscuro como son las adicciones. Yo creo que hay que tener valor para separarse de eso que es tan fácil caer. Tienes que tener corazón y creo que mi papá es una persona con mucho corazón y creo que eso es lo que lo levantó».
Comentó que nunca se ha drogado debido a que lleva una vida en la que prefiere trabajar y atender compromisos que contribuyan a su carrera; sin embargo, sí conoce las sustancias y hasta sabe cómo conseguirlas.
«He estado cerca de la marihuana, he estado cerca de todas las drogas. Las he visto, he visto cómo gente cercana a mí las ha probado, las he visto bajo este efecto».
Comenta que no les tiene miedo, sino más bien respeto, por lo que mejor se mantiene alejado: «Sí hay veces en que nos sentamos y tenemos conversaciones sobre las drogas, las sustancias, las fiestas».
Sufrió bullying
Emilio Osorio era un niño cuando tuvo que enfrentar el bullying de otros niños por los desnudos que su mamá hizo para publicaciones impresas.
«Mis respuestas eran ridículas porque llegaban con ofensas y yo decía: ‘gracias a eso estoy comiendo’, que eran las repsuestas que yo sabía de mi mamá. Esas respuestas les daban risa a los niños de 8 años».
Aseguró que ante los comentarios sobre su madre aprendió a defenderse, pero sin llegar a pelear de forma agresiva. De esta forma ya toma con calma cualquier mensaje ofensivo hacia Niurka.
«Ese mismo brother que está diciendo eso es el que el día de mañana, si mi mamá vuelve a sacar otra sección de ‘Playboy’, la va a comprar. Mi mamá va a estar feliz de la vida en Mérida comprándose lo que quiere gracias a ese brother».