Alumnos y académicos de esa institución exigieron la salida de Patricio Méndez Garrido, director del CNM, a quien señalaron por bajo desempeño artístico, violencia académica y acoso sexual
Agencia Excélsior
Cerca de 200 alumnos y académicos del Conservatorio Nacional de Música (CNM) acordaron ayer, por mayoría de votos, un paro total de actividades por 48 horas para exigir la salida del director de orquesta Patricio Méndez Garrido, nombrado director de la institución el pasado 15 de agosto.
La razón por la que estamos presentes afuera de las instalaciones es por la designación del director Patricio Méndez, ante lo cual muchos de los presentes estamos inconformes”, expresó uno de los representantes del alumnado a través de un megáfono. Y aseguró que, hasta el momento, no han obtenido una resolución satisfactoria por parte de la Subdirección General de Educación e Investigación Artísticas (SGEIA) del INBAL, que dirige Mónica Hernández Riquelme.
Estamos de acuerdo en que queremos un cambio positivo para el CNM, pues durante años no nos han escuchado y hemos tratado de luchar por mejorar nuestra escuela y nuestro futuro como músicos, pero la designación de Patricio Méndez significa un retraso”, aseveró ante el aplauso de la concurrencia.
Durante la asamblea, también se dio lectura a un comunicado de las integrantes del colectivo Unidas CNM, quienes han señalado al titular por acoso, pero se han mantenido en el anonimato ante posibles represalias, y algunos docentes y alumnos alzaron la voz.
Finalmente, hacia las 13:00 horas, el alumnado votó por el paro y, de forma pacífica, desalojó la mayor parte de las instalaciones.
Excélsior charló con María Esther García Salinas, académica de flauta transversa a nivel licenciatura del CNM, quien coincidió con la exigencia de los alumnos y puntualizó que el nuevo titular no cuenta con el perfil para el cargo.
Por ejemplo, señaló que Méndez Garrido nunca ha dirigido orquestas de peso como la Filarmónica de la CDMX, la OFUNAM o la Sinfónica Nacional, debido a que carece de competencia profesional.
Esta institución académica ha tenido a directores como María Teresa Rodríguez, Aurora Serratos, Armando Montiel, que tuvieron una carrera sólida en el terreno profesional, pero Patricio Méndez no la tiene; hoy él sólo dirige una orquesta infantil en Tlalnepantla”.
¿Cuál sería el llamado a Lucina Jiménez, titular del INBAL? “Invito a que las autoridades atiendan el problema. Recién vimos un desplegado de que la escuela Tito Puente (donde Méndez Garrido cursó su doctorado) tiene la aprobación de la SEP. Sí, pero no es un programa serio el que tiene esa universidad. Pareciera que los funcionarios del INBAL no escuchan a maestros y alumnos por soberbia y por no reconocer que se equivocaron”.
Hacia las 14:30 horas, un grupo de alumnos y profesores, encabezados por Hernández Riquelme y Pedro Fuentes Burgos, subdirector general administrativo y titular del Comité de Ética del INBAL, rehusaron a salirse de las instalaciones.
Fuentes Burgos insistió en que los alumnos deben interponer sus denuncias. “Sólo han llegado denuncias genéricas, como el caso de los tendederos, y eso impide (cualquier acción), porque estaríamos violando los derechos de otros, como del director, sin elementos de modo, tiempo y lugar”.
Y se refirió a la falta de nivel de Méndez Garrido. “Es subjetivo, en tanto a cuáles son las funciones que tiene un director de una escuela. No forzosamente tiene que ser el gran artista, que ha triunfado, sino que debe administrar la escuela”.
¿Y él ha administrado alguna escuela antes? “No, pero tiene conocimientos por su formación profesional y en la entrevista (del proceso de auscultación) fue muy asertivo”.
Por su parte, Hernández Riquelme se comprometió a respetar el paro de 48 horas, aunque cuestionó que no se trata de toda la comunidad.
¿Hubo resistencia de algún alumno ante el paro? “Pero no es porque estén de acuerdo, sino por una inercia. La población de estudiantes es de 970 alumnos y la de docentes, de 188. Vamos a respetar lo que decida un grupo de chicos, pero hay que respetar (a los demás).
Hernández insistió en que el INBAL mantendrá el diálogo y buscará reunirse con académicos y alumnos para buscar una salida, pero negó que se pueda destituir a Méndez Garrido sin pruebas.
