A nivel nacional se ha contabilizado al menos la expedición de 166 actas en los estados de Jalisco (103) y la Ciudad de México (63), y dos en el extranjero; en nuestro país también ha habido casos de centros escolares donde los menores tienen un gran recibimiento
Agencia Excélsior/CIUDAD DE MÉXICO.
Mientras sigue el avance del reconocimiento de las infancias transgénero a través de la rectificación de actas de nacimiento en diversos estados de la República, madres y padres de niñas, niños, niñes y adolescentes trans buscan que la inclusión se extienda a las escuelas.
A nivel nacional se ha contabilizado al menos la expedición de 166 actas en los estados de Jalisco (103) y la Ciudad de México (63), y dos en el extranjero, una en el Consulado mexicano de San Bernardino, California; y otra en la embajada mexicana de Dinamarca, aunque faltarían por incluir los datos de actas expedidas por los estados de Morelos, Oaxaca y Nuevo León.
Por otro lado, la Asociación por las Infancias Transgénero ha contabilizado 143 colegios en diversos estados de la República que han realizado buenas prácticas, es decir, que han hecho alguna acción más allá de sólo inscribirlos y han buscado la forma de integrarlos en la comunidad e infraestructura escolar.
UN CASO DE DISCRIMINACIÓN
Aún con un acta de nacimiento con rectificación de nombre y género, es decir, con una identidad legal incuestionable hay escuelas que han discriminado a niñas, niños, niñes y adolescentes transgénero, como fue el caso de Adriana Sánchez, en la Ciudad de México y su hijo trans que pasó del preescolar a la primaria en un colegio particular de la alcaldía Gustavo A. Madero.
De hecho, Adriana adelantó el proceso para obtener el acta de su hijo para poder inscribirlo en el nuevo nivel, pues así se lo requirió el propio colegio.
Me dijeron en el mes de febrero (2022) que si para el mes de agosto no tenía el acta pues definitivamente no podría ser de que le llamaran ya con su nombre con el que se autopercibe”, recordó Adriana.
A pesar de tener el acta cuando fueron las inscripciones, en el mes de agosto me dijeron que no había ningún problema, que si había cupo; sin embargo, cuando yo doy el nombre de mi hijo, me dicen no, no le puedo inscribir, porque aquí hay una anotación que dice que primero tiene que entrevistarse con el directivo y no se le puede inscribir”, explicó.
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El director de la escuela le dijo que no contaban con la infraestructura para tener inscritos a niños como el hijo de Adriana, cometiendo así un acto de discriminación contra el derecho a la educación y al libre desarrollo de la personalidad.
De verdad esto es tan ilógico, porque yo les dije que mi hijo no requiere de ninguna infraestructura diferente a la que ya cuenta la escuela, mi hijo como cualquier niño requiere el baño de niños, el salón que va a incluir a todo el grupo, no requiere de ningún espacio en específico o especial para él”, lamentó Adriana.
Los baños o servicios sanitarios son uno de los espacios en que niñas, niños y niñes trans son más discriminados y víctimas de bullying.
Apenas el 24 de octubre, la escritora J.K. Rowling, autora del libro de Harry Potter, criticó una intervención realizada por activistas trans en los baños neutros de la Facultad de Filosofía y Letras de la UNAM.
Adriana ha actuado legalmente contra la escuela y sus autoridades, pues la hermana de su hijo, inscrita en la secundaria, también fue cuestionada por el profesor de socioemocional, sobre su hermano, el cual ya está inscrito en una escuela, donde lo aceptaron sin problema.
La reacción fue de señora para nosotros esto es una oportunidad de las nuevas demandas de la niñez y nosotros estamos abiertos a eso, no conocemos, no hemos tenido ningún caso, pero si el tener a su niño en esta escuela, si usted decide para nosotros sería una gran oportunidad, y yo al escuchar eso, dije es aquí”, señaló la madre.
UN CASO DE INCLUSIÓN
A diferencia de lo ocurrido con Adriana, en la alcaldía Azcapotzalco, la secundaria pública número 54 recibió sin ningún problema a Alan, un niño trans de 12 años, que inició su transición en su escuela primaria, también pública, donde las autoridades tampoco tuvieron problema para integrarlo, la resistencia vino de la inspectora de zona de la SEP, narró a Excélsior, Paola Mompala, madre de Alan.
No entendió bien la situación y no aceptaba que Alan se viviera dentro de su género dentro de la escuela, sin embargo, fuimos a la SEP gracias a la licenciada Tania Morales, de la Asociación para las Infancias Trans y nos atendieron bastante bien, ahí orientaron a las maestras, orientaron a la supervisora de zona y a la conclusión a la que llegamos es que sólo falta información”, comentó Paola.
Dentro de los fundamentos para el respeto de la identidad de género dentro de las escuelas desde el Artículo 1 de la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos se prohíbe: “toda discriminación motivada por origen étnico o nacional, el género, la edad, las discapacidades, la condición social, las condiciones de salud, la religión, las opiniones, las preferencias sexuales, el estado civil o cualquier otra que atente contra la dignidad humana y tenga por objeto anular o menoscabar los derechos y libertades de las personas”.
La Ley Federal para Prevenir y Eliminar la Discriminación, y el artículo nueve punto 19 prohíbe: “Obstaculizar las condiciones mínimas necesarias para el crecimiento y desarrollo integral, especialmente de las niñas y los niños, con base al interés superior de la niñez”; y que tiene su símil en el artículo seis punto 19 de la Ley para Prevenir y Eliminar la Discriminación de la Ciudad de México.
Incluso desde el 3 de junio de 2019, las, los y les alumnos pueden llevar a la escuela el uniforme escolar sin distinción de género, de acuerdo a la circular AEFCM/005/2019 de la Autoridad Educativa Federal en la CDMX. Cualquiera escuela que niegue la inscripción o el acceso a las infancias transgénero estaría desatendiendo por lo menos esas disposiciones.
En la secundaria ya entró con los papeles, ya con el nombre correcto, sin embargo yo hablé con el equipo directivo de la escuela para exponerle el caso y el equipo directivo estuvo muy dispuesto a escuchar, me hizo muchas preguntas para entender el caso”, dijo Paola sobre la recepción de su hijo en el nuevo nivel escolar.
El 29 de octubre ha sido nombrado como el Día de las Infancias Trans en México, por las asociaciones civiles que les representan y defienden, porque fue precisamente ese día en 2020 cuando se dio un gran avance en el reconocimiento de las infancias y adolescencias transgénero, con el decreto del gobierno de Jalisco para que en las actas de nacimiento no trajeran género.