domingo, noviembre 24, 2024

Álvaro Uribe comparte su lucha contra el cáncer

El escritor mexicano entrega el libro póstumo Tríptico del cangrejo, en el que detalla las tres veces que enfrentó la enfermedad

Agencia Excélsior

Miedo, tristeza, enojo, cansancio, insomnio; pero también alegría, humor y la tranquilidad que le dio escribir hasta el final. El escritor mexicano Álvaro Uribe (1953-2022) enfrentó el cáncer en tres ocasiones, entre enero de 2008 y marzo de 2022. La primera vez fue en el pulmón derecho, la segunda (2018) en la próstata y la tercera en el pulmón izquierdo.

El novelista y cuentista venció al invasor en los dos primeros enfrentamientos, en el tercero perdió la batalla. Durante esos 14 años de lucha contra la enfermedad, escribió tres diarios que decidió compartir con sus lectores en Tríptico del cangrejo (Alfaguara).

Álvaro deseaba que se publicarán los tres diarios en un solo volumen. Por eso me da gusto que un año después de su muerte ya esté circulando el libro. Es un triple testimonio de un triple cáncer, de su experiencia brutal con esa enfermedad”, afirma en entrevista la poeta Tedi López Mills, su compañera de vida durante 40 años.

Detalla que todo lo escribía a mano. “En 2009 transcribió el primero, Cuaderno de la paciencia, pues lo quería publicar él, incluso hizo un prólogo. Pero después decidió no hacerlo, para que el cáncer no fuera la única conversación pública, e incorporó parte de ese material en sus próximas dos novelas, Morir más de una vez y Autorretrato de familia con perro.

El segundo diario, El árbol, forma parte de su última novela, Los que no. Ésta es el diario convertido en ficción, aunque el cáncer fue absolutamente real. Y el diario más terrible, más complicado, más triste, fue Tres Cangrejo, porque el tercer cáncer fue muy agresivo, muy difícil; él se sometió a un tratamiento brutal de quimioterapias, fueron 35 sesiones. Él narra todo con detalle”, agrega.

La escritora indica que Uribe fue “increíblemente racional respecto a su condición. Nunca se adelantó a los hechos, siempre prestó mucha atención a lo que decían los doctores, fue muy disciplinado en su tratamiento, nunca se salió del guion y él tomó la decisión final. Me dijo ‘me voy absolutamente dichoso’”.

Desde que el autor de Topos (1980) y Caracteres (2018) decidió abandonar los brutales tratamientos, cuenta, “de ahí hacia adelante fue una procesión hacia la muerte y él fue el director de escena y el guionista de su propia muerte. Finalmente ocurrió dichosa, alegre, nunca perdió la sonrisa, nunca tuvo miedo”.

López Mills, quien redactó el epílogo, destaca que “fue una lección de vida y de muerte”. Y menciona que Uribe dejó lista, desde 2021, una recopilación de ensayos, La suma de las partes, que están viendo dónde se publica. “También dejó una novela inconclusa. Y hay cuentos que se podrían juntar en un volumen”.

Por lo pronto, el 21 de mayo, a las 12:00 horas, se le realizará un homenaje en la Sala Manuel M. Ponce del Palacio de Bellas Artes, con motivo de los 70 años que cumpliría Álvaro Uribe, en el que participarán Pura López Colomé y Fabio Morábito, entre otros.