Luego de quejas de usuarios que encontraron cámaras ocultas, Airbnb ha tomado cartas en el asunto en favor de la privacidad de sus usuarios.
Agencia Excélsior
Se acabó la vigilancia en los departamentos o cuartos de renta a través de la app Airbnb que, en una reciente actualización de términos, ha prohibido el uso de estos dispositivos para “priorizar la privacidad” de los inquilinos.
La nueva normativa entrará en vigor el 30 de abril y responde a la solicitud de usuarios que se sentían vigilados con las instalaciones de este tipo de dispositivos al interior del inmueble. La plataforma ha dado a los anfitriones el final del mes de abril para retirar los dispositivos y, en caso de no cumplirse, la propiedad será eliminada del listado e, incluso, la cuenta del usuario puede quedar bloqueada.
Sin embargo, habrá excepciones a la norma. Airbnb permitirá cámaras de seguridad exteriores, pero pedirá a los anfitriones revelar su uso y ubicación en los anuncios dentro de la plataforma de renta advirtiendo que, ninguno de estos aparatos puede ser usado para tratar de obtener una imagen del interior del inmueble.
Tampoco pueden ser usados en zonas donde las personas esperen privacidad, incluso si están en un área abierta como una alberca o la entrada a un sauna.
Los arrendadores que ofrecen sus inmuebles también tendrán que revelar la existencia de aparatos para medir los decibeles, pero sin la obligación de revelar donde se encuentran los medidores.
Los monitores de decibelios comenzaron a popularizarse cuando algunas personas usaban los apartamentos para fiestas, las cuales quedaron prohibidas por Airbnb en 2022.
Si existen dispositivos inteligentes como sistemas Alexa o Google es ideal avisar a los usuarios de su existencia y permitirles la capacidad de desconectarlos.
