Jaime López | Ciudad de México
En la mañanera de este lunes, el presidente Andrés Manuel López Obrador adelantó que acordará con la virtual presidenta electa, Claudia Sheinbaum, cómo ejecutar el llamado “plan C” y qué inciaitivas impulsarán.
“Lo voy a hablar con Claudia, la virtual presidenta electa, porque presentamos iniciativas que están en el Congreso, a ver cuáles de esas iniciativas podemos impulsar y que se alcancen a aprobar”, dijo el mandatario en su rueda de prensa.
Señaló que dado que la nueva legislatura inicia el 1 de septiembre, su gobierno tendrá un mes para enviar iniciativas antes de que concluya su mandato y tome posesión Sheinbaum el 1 de octubre.
“La futura o virtual presidenta electa y luego presidenta constitucional, porque creo que la próxima legislatura empieza el 1 de septiembre y yo termino a finales de septiembre, es un mes, entonces nos tenemos que poner de acuerdo para ver esas iniciativas con Claudia y otras cosas que tenemos que ver de manera conjunta”, dijo el presidente.
Luego de destacar que no busca imponer nada, insistió en que piensa que una de las reformas que se debe abordar es la relacionada con el Poder Judicial.
“Sí pienso que se tiene que abordar el tema de la reforma al Poder Judicial, porque no es posible mantener un Poder Judicial que no esté al servicio del pueblo, de la sociedad, que esté al servicio, como es de dominio público, de una minoría y a veces de la delincuencia, al servicio de la delincuencia organizada y de cuello blanco”, aseguró.
“Tiene que haber un Poder Judicial que represente a los mexicanos, incorruptible, porque si no no avanzamos, pero eso hay que verlo, platicarlo con la virtual presidenta electa, ver qué opinión tienen también los legisladores sobre el caso”, agregó.
En ese sentido, López Obrador destacó que durante su gobierno ha buscado distintas vías para reformar el aparato judicial, pero sin éxito. “Yo he buscado con otros mecanismos la reforma al Poder Judicial y la verdad no los veo eficaces, por ejemplo, no se puede pensar en la desaparición del Poder Judicial con una reforma constitucional y crear un nuevo Poder Judicial, algo parecido a lo que hizo Zedillo, no estoy de acuerdo con eso”.
“La otra opción es dejarle a los integrantes del Poder Judicial, esa era mi intención inicial, el que ellos impulsaran la reforma, pero no tuvimos éxito, siguieron sometidos a los poderes económicos y al poder político, no tuvieron la arrogancia que sentirse libres, demostraron su vocación de vasallos, entonces esa vía no”, añadió.
“Entonces, cuál es la vía que propongo: la elección, que el pueblo elija a los magistrados y a los ministros. Y ahí es donde se puede llegar a un acuerdo, se puede matizar sobre los requisitos, pero que al final sea en elecciones libres, directas, en las que el pueblo decida quién debe ser juez, magistrado o ministro después de conocer trayectorias y saber quiénes son los candidatos, mujeres y hombres”, insistió.