Mientras decenas de civiles morían por un nuevo ataque en Gaza, el mandatario dijo que su táctica militar funciona
Agencia Excélsior
El primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu, aseguró que la presión militar contra Hamás en Gaza “funciona” e instó al movimiento islamista a deponer las armas.
Respecto a Hamás en Gaza, la presión militar funciona (…) Podemos ver que empiezan a aparecer grietas” en sus exigencias en las negociaciones, declaró Netanyahu al inicio de una reunión de su gabinete.
Hamás tiene que entregar las armas. Sus líderes serán entonces autorizados a irse” del territorio, añadió
Las declaraciones de Netanyahu coinciden con el intento de los países mediadores (Egipto, Qatar y Estados Unidos) de volver a negociar un alto el fuego y asegurarse la liberación de los rehenes israelíes que siguen en Gaza.
Un alto responsable de Hamás dijo el sábado que el movimiento aprobó una nueva propuesta de los mediadores e instó a Israel a apoyarla. La oficina de Netanyahu confirmó haberla recibido y dijo que había presentado una contrapropuesta.
SIGUEN LOS ATAQUES
Al menos 64 personas, la gran mayoría civiles, murieron en bombardeos israelíes sobre distintos puntos de la Franja de Gaza
a lo largo de ayer, cuando la población musulmana celebra la festividad del Eid al Fitr, o Fiesta del Sacrificio, que pone fin al mes sagrado musulmán del Ramadán.
Uno de los incidentes más graves ha sido el del campamento de refugiados de Mawasi, a las afueras de Jan Yunis, donde han muerto seis civiles, tres de ellos niños, por el impacto de un proyectil israelí sobre un grupo de niños que estaban jugando, según la agencia de noticias palestina Sanad.
Hamás condenó los ataques “terroristas” del “ejército de ocupación sionista” y dijo que “matar a niños el día del Eid dentro de las tiendas (de campaña) a las que habían huido revela el fascismo de la ocupación y su falta de valores humanos y morales”.