miércoles, abril 9, 2025

“Llegué a odiar mi vida”; recuerdos precoces de Martín Galván

A los 14 años el jugador debutó con Cruz Azul, pero su vida en el futbol se convirtió en un delirante calvario que le hizo ser infeliz

Agencia Excélsior

En la niñez de Martín Galván reinaba la locura. Fue un futbolista precoz que a los 14 años debutó en un torneo Interliga con el Cruz Azul. Sobre él, caían como buitres cámaras de televisión y micrófonos, hasta que poco después, el sueño se rompió en mil partes.

A pura fe siguió adelante cuando ya no era más el niño maravilla, sino el hombre al que se le señalaban sus errores, “llegué a odiar mi vida”, cuenta desde Salamanca, España, a donde se refugió, “porque aquí nadie me conocía”. Hoy relata su historia pensando en Gilberto Mora, el chico de 16 años que irrumpió en el futbol mexicano con los Xolos.

¿En qué momento la pelota dejó de ser un juego?

No lo sé. Llegué a odiar mi propia vida por todos los problemas de esa imagen de niño maravilla. Me cerraron muchas puertas en varios lados, por más que entrenaba ya no pasaba nada conmigo. Pensé en dejar el futbol a los 23 años, por fortuna llegó el Salamanca para recuperar algo que amaba, ahí nadie me conocía, no tenía nada qué perder.

¿La suya es la clásica historia en la que los padres querían sacar provecho?

No, nunca nos faltó nada en casa, tuvimos lo necesario, el dinero llegó a nuestras vidas después, eso es cierto. Mi papá negoció un gran contrato con Cruz Azul, incluso el club pagó la carrera de medicina de mi hermana. Jamás les reprocharía algo a mis padres, no estoy en posición, quizá se confiaron de que yo la iba a hacer en grande y descuidaron sus proyectos. Pasó todo de golpe, de tenerlo todo, nos quedamos como al principio.

¿Que sentía al jugar a los 14 años en Primera División?

Era más un tema físico, porque mi cuerpo no estaba totalmente desarrollado. Aun así nunca me sentí en desventaja, era menudo y me escapaba de los golpes, no era tonto, jamás chocaba con los defensas. En partidos oficiales me fue bien, pero en los entrenamientos no me rompieron la pierna de milagro. El derecho de piso era criminal. Benjamín Galindo me dio mucha confianza, aunque Sergio Markarian fue quien me debutó. Luego otros entrenadores pasaron por Cruz Azul sin creer en mí.

HABLA DE QUE EN MÉXICO LE CERRARON LA PUERTA.

Sí, porque alrededor mío siempre hubo mucho ruido, también pasajes de indisciplina que no lograba entender, yo vivía siempre en una burbuja. A los 23 años estaba tan desesperado que fui a hacer pruebas al León, vestido de blanco, como un chico más de cualquier barrio. Al verme ahí pensé que antes lo tuve todo y ahora tocaba fondo, era algo duro para mí. Aunque les gustó mi estilo de juego, no me permitieron entrar porque tenía un pasado, era Martín Galván, el famoso indisciplinado, todo lo que se habló de mí, regresaba como karma. Quería retirarme, odiaba a Dios y al mundo.

¿Cruz Azul le dio la espalda?

La institución no como tal, depende de los directivos que estén. Cruz Azul nunca procura a sus talentos de cantera: Javier Aquino, Néstor Araujo, Jair Pereira, nunca quisieron volver. Cuando salí de ahí me llegó la noticia de que sería padre y fue complejo. Tuve una niñez bonita hasta los 14 años. Ahora tengo hijos, esposa y el futbol se va a acabar, estoy más cerca del retiro. Terminé la preparatoria, estudié el segundo módulo de entrenador porque quiero seguir ligado a esto que amo, así que planeo quedarme en España.

MORA NO TIENE LA MISMA EXPOSICIÓN MEDIÁTICA

Gilberto Mora debutó a los 15 años en un escenario rutilante sobre el que ha construido bases para pensar que será un buen futbolista.

El fin de semana anotó su segundo gol en el futbol mexicano mientras acumula ya 26 juegos oficiales, lo que para Martín Galván es una buena señal.

Son otros tiempos, hoy en día si un chavo comete errores, es por tonto, tiene todo el cobijo para triunfar. Antes, el futbol era una carnicería, hoy te pegan y te piden perdón. Gil Mora no tiene la misma exposición mediática que me tocó y lo mejor es que le dan continuidad, no sólo lo debutaron, sino que le han dado partidos”.

Lo importante, cree Galván, es que el proceso con Mora no tenga inconvenientes por culpa de los directivos.

El peligro son ellos, si no lo ayudan, lo van a dejar a la deriva. No basta con darle un contrato, sino una carrera con paciencia porque muchos sólo quieren al futbolista joven para ser noticia en los medios”.

BUENA SEÑAL

Gilberto Mora debutó en agosto de 2024 en un partido ante el Monterrey gracias a Juan Carlos Osorio. El colombiano se fue, pero en Xolos de Tijuana lo siguen considerando.