lunes, abril 28, 2025

Entre anexos y jeringas, el veneno que recorre Mexicali

El 20% de los cadáveres analizados en Mexicali tienen rastros de fentanilo mientras los centros de rehabilitación luchan por contener la crisis

Agencia Excélsior

En Mexicali, donde el calor del desierto choca con el frío de la indiferencia, el fentanilo avanza sin freno. Centros privados como Nueva Vida recogen hasta dos personas por día con consumo crónico de opioides, y los datos del Servicio Médico Forense confirman lo que las calles ya sabían: 20% de los cadáveres analizados en la capital bajacaliforniana contenían rastros de fentanilo, casi el doble que en Tijuana. “Estamos recogiendo a los que el sistema dejó ir”, dice Joel Benavides, encargado de cuatro unidades de tratamiento.

Las recaídas son más rápidas, las rehabilitaciones más cortas y los jóvenes que ingresan están cada vez más dañados.

Dormitorios con literas triples, pacientes en trance y una lucha silenciosa contra una sustancia que puede matar con solo dos miligramos son parte del nuevo panorama. Este reportaje especial de Excélsior, parte de un esfuerzo conjunto, revela la batalla diaria en los anexos y centros de atención de Mexicali frente a una crisis de salud pública que avanza más rápido que las políticas para contenerla.

Investigaciones Excélsior presentará mañana un especial sobre el aumento en el uso de drogas inyectadas en Mexicali, donde organizaciones y asociaciones civiles optaron por combatir el problema a su manera, mediante centros de desintoxicación y salas de consumo seguro. Disponible en televisión, radio, prensa, redes sociales y Excélsior Digital.