Debido a su privilegiada ubicación geográfica y a la riqueza natural de su flora y fauna, el Cártel de Sinaloa y el CJNG cruzan por ahí 95% de cargamentos
Agencia Excélsior
La ruta del Pacífico, que conecta a los estados del occidente de México con la costa oeste de Estados Unidos, es la ruta prioritaria para los dos cárteles hegemónicos, el de Sinaloa y el Jalisco Nueva Generación (CJNG), por donde están cruzando hasta 95% de los cargamentos de droga e indocumentados.
Así alerta la DEA a las agencias de seguridad y migración, en el informe que presentó ante el Congreso estadunidense.
Esta ruta discurre por la carretera federal México 15, desde Sonora hacia Arizona y la federal 2, desde Baja California hacia California, las cuales tienen siete retenes, incluyendo uno militar considerado como el de mayor tecnología para la detección de contrabando ilegal, pero también por esta región hay vastas regiones desérticas y costeras que facilitan el trasiego.
En entrevista con Excélsior, Víctor G. Félix Félix, analista en políticas públicas, especializado en desarrollo de capacidades, táctica gubernamental y seguridad, recordó que el más reciente informe presentado por el secretario de Seguridad federal, Omar García Harfuch, establece que en México había 944 laboratorios con reactores para la producción de drogas duras como el fentanilo, metanfetamina y cocaína, siendo los estados productores Sinaloa, Michoacán y Sonora, por lo que esta colindancia y posición geográfica privilegiada hacen de la región Pacífico, la salida natural de estas drogas hacia el Norte.
A partir de los datos que registra la DEA se revela a Sonora como el estado fronterizo mexicano de mayor tránsito de fentanilo de las 32 entidades en nuestro país, por una razón clara y sencilla, que hasta 65% de la droga decomisada, específicamente del fentanilo, decomisado todo el año pasado por las agencias policiales estadunidenses, fueron aseguradas en el borde fronterizo con Arizona, es decir, pasaron por Sonora 65 kilos de cada 100 que decomisó EU”, aseguró Víctor Félix.
El especialista recordó que, de acuerdo con la misma DEA, la Patrulla Fronteriza y el Departamento de Seguridad Nacional de Estados Unidos, por cada kilo de droga decomisado en la frontera, hay seis kilos más de tráfico ilegal que sí logra llegar al mercado; esta cifra está basada en la cantidad de droga y adictos que circulan por las ciudades estadunidenses.
El estudio Evaluación Nacional de Amenazas 2025 que la Administración para el Control de Drogas (DEA) presentó ante el Congreso de EU el pasado mes de mayo establece que son cinco las sustancias de mayor tráfico y consumo entre los adictos en la Unión Americana: el fentanilo, nitazenos, xilacina, la metanfetamina y la cocaína; de acuerdo con este informe, hasta 95% de estas drogas están siendo traficadas por los cárteles de Sinaloa y el de Jalisco Nueva Generación, a través de la ruta del Pacífico.
CÁRTELES TAMBIÉN TRAFICAN CON ESPECIES MARÍTIMAS
El especialista indicó que debido a su privilegiada ubicación geográfica, la riqueza natural de su flora y fauna, a través de la ruta del Pacífico, además de droga y personas indocumentadas; los cárteles también trafican con especies marítimas como el buche de totoaba y pepino del mar; con maderas exóticas como el palo fierro; así como minerales como oro, cobre y otras piedras preciosas.
El informe de la DEA establece que el Cártel de Sinaloa mantiene presencia en 31 estados del país a excepción de Jalisco; mientras que el CJNG sí ha logrado tener presencia en todo el territorio nacional.
El Estado mexicano tiene que tener mucho cuidado en el desarrollo de sus capacidades institucionales en el control de las zonas y regiones fronterizas, luego de que este informe de la DEA nos dice que Sonora es el estado por donde más se trafica fentanilo hacia el gran mercado en EU, implica una enorme responsabilidad para gobernantes locales y federales, no solamente de fortalecer el control de rutas y regiones, sino también de mantener el control de la gobernabilidad del estado y del orden interno en las corporaciones policiales”, agregó Víctor Félix.
Respecto de la dinámica criminal del tráfico de drogas y su efecto en la violencia, el especialista advirtió que en los últimos años ha bajado la incidencia de homicidios dolosos, pero incrementado notoriamente el número de personas desaparecidas.
Para ejemplificar este punto, recordó que en el primer trimestre de 2025 en Sonora se registraron 346 víctimas de homicidios dolosos en carpetas de investigación, pero en este mismo periodo hay reporte de 678 personas desaparecidas con ficha de búsqueda por parte de los colectivos ciudadanos y la Comisión de Búsqueda local y federal.
Mutó la operación criminal y hoy los grupos delictivos privilegian las desapariciones, bajo la premisa de que si no hay cuerpo, sin evidencia no hay delito que perseguir”, advirtió.
El especialista recordó que a nivel nacional hay un promedio de una víctima de homicidio doloso por cada tres personas desaparecidas.
Ha cambiado en México la dinámica de la violencia criminal y eso lo dice claramente la evaluación de amenazas 2025, el informe que la DEA le presenta al Senado y al Congreso estadunidense; de ahí el gobierno federal y del estado deben tomar nota porque eso predispone acciones cada vez más duras, inteligencia más intrusiva en nuestro país por parte de las agencias de aplicación de la Ley en los Estados Unidos”, señaló.
Víctor Félix recordó que los tres cárteles de la droga más poderosos en México, el CJNG y el Cártel del Noroeste fueron declarados como organizaciones terroristas, lo cual los saca del derecho penal mundial y los pone dentro del Derecho Humanitario Internacional que considera combatiente a todo civil armado que lesiona a ciudadanos.
ROMPEN CANDADOS
Respecto a la ruta del Pacífico y cómo es que tanta droga e indocumentados están llegando a la frontera de Sonora y Baja California con Estados Unidos, a pesar que por las carreteras que atraviesan la región hay siete retenes, incluyendo el militar de Querobabi, que es considerado el más moderno y seguro en América Latina, Víctor Félix explicó que el hallazgo de puntos de halconeo y vigilancia en la región desértica del noroeste de México es por la existencia de rutas de trasiego a través de la costa del mar de Cortés y el desierto de Sonora que atraviesa la línea internacional.