martes, noviembre 26, 2024

Tienen hepatitis 750 mil mexicanos y no lo saben; enfermedad tarda en manifestarse hasta 20 años

La mayoría de los individuos que hoy están contagiados podrían padecer cirrosis hepática o cáncer de hígado, según expertos

Agencia Excélsior

Actualmente, se estima que en México viven cerca de 750 mil personas que podrían padecer hepatitis C y no lo saben, reveló a Excélsior, Alethse de la Torre, directora general del Centro Nacional para la Prevención y el Control del VIH y del Sida (Censida).

Añadió que, debido a las complicaciones  de esta enfermedad —que puede afectar a cualquier persona, incluso desde el nacimiento—, los síntomas tardan en manifestarse entre 10 y 20 años, la mayoría de los individuos que hoy están contagiados podrían padecer cirrosis hepática o cáncer de hígado y, en consecuencia, requerir de un trasplante a largo plazo.

“Se estima que de hepatitis C en todo el país existen cerca de 750 mil personas infectadas. Un mensaje muy importante es siempre buscar a las personas que desconocen este diagnóstico, porque estas 750 mil personas pueden recibir tratamiento gratuito”, señaló.

En el Día Mundial contra la Hepatitis, que se conmemora el 28 de julio, la titular del Censida añadió que los dos tipos de hepatitis que se presentan con mayor frecuencia en nuestro país, son la B y la C, pero acotó que para la primera existe una vacuna que se aplica desde el nacimiento, por tanto, su riesgo ha disminuido.

En contraste, para la tipo C, que ya  es considerada un problema de salud pública, se  estableció el Programa Nacional de Eliminación del Virus de Hepatitis C para  asegurar el acceso universal y gratuito a pruebas de detección y medicamentos, a través del cual ya se han distribuido más de 923 mil pruebas rápidas de detección.

“Hemos establecido una estrategia de detección libre de estigma y discriminación. De 40 unidades médicas, donde se hacían las pruebas, hemos pasado a 169 para atender a personas sin seguridad social.

“Es una prueba de sangre muy sencilla que se realiza con un piquetito en el dedo, la cual, si sale positiva, se corrobora para iniciar un tratamiento con un medicamentos que se toma diario durante tres meses, donde está comprobado que el 95 % de los pacientes se curan”, explicó.

Alethse  de la Torre reconoció que en nuestro país, el número anual de casos de hepatitis C y de otro tipo sí están aumentado, ya que en 2021 se confirmaron  más de 6 mil casos,  pero, acotó, que el incremento se debe a que gracias al programa nacional se están realizando un mayor número de diagnósticos contra el mal.

“La razón de que se haya tenido este incremento es que estamos buscando más y estamos diagnosticando y atendiendo a más pacientes, lo cual antes no se hacía. Por eso estamos acercando la atención y los tratamientos gratuitos a todas las comunidades”, indicó.

Servicio. Las personas que requieren información, orientación o asesoría sobre los servicios de atención de hepatitis C pueden consultar el sitio https://bit.ly/3cLmrYF o enviar correo a: hepatitisc@salud.gob.mx o marcar el número telefónico: 5519469772.

¿QUIÉNES DEBEN HACERSE LA PRUEBA PARA DETECTAR HEPATITIS C?

La hepatitis C es una infección que, sin tratamiento, provoca inflamación y deterioro progresivo del hígado, y para erradicarla es fundamental la detección oportuna y la atención integral, por tanto, la directora de Censida reiteró que la prueba de detección está disponible para todas las personas, pero, principalmente, para la población con diferentes  factores de riesgo.

Las causas

Personas que pueden padecer hepatitis:

Alteraciones en las pruebas de funcionamiento hepático.

Personas que tuvieron transfusiones sanguíneas o trasplantes de órganos antes de 1994.

Quienes reutilizan agujas, equipo o dispositivos por consumo de sustancias sicoactivas.

Personas con accidentes con agujas y punzocortantes en la atención de personas en unidades de salud.

Pacientes con VIH.

Pacientes que usaron material y equipo médico no estéril durante la hemodiálisis.

Prácticas sexuales en las que exista contacto con sangre.

Uso por más de dos personas de cepillos dentales, rastrillos o navajas de afeitar.

Familiares con cirrosis o hepatitis C.

Utilización de materiales sin esterilizar o sin regulación para tatuajes, perforaciones, delineados.

Tratamientos no regulados de acupuntura y mesoterapia.