El embajador de Estados Unidos en México afirma que ambas naciones cuentan con una base regional que reconoce a la migración como un desafío compartido
Agencia Excélsior
Los traficantes de personas cometen uno de los delitos más inhumanos, ya que llevan a los más vulnerables por un camino de muerte y dolor para lucrar con sus vidas y su dignidad, advirtió ayer miércoles el embajador de Estados Unidos, Ken Salazar.
En su segundo día de visita por Chiapas, Veracruz y Tabasco, el diplomático reafirmó que el trabajo conjunto es la mejor manera de proteger a los migrantes y para desmantelar sus redes.
Trabajar en la seguridad de los migrantes es una responsabilidad compartida que involucra a los gobiernos de México y de los Estados Unidos, así como a los de todo el hemisferio occidental.
Gracias a la Declaración de los Ángeles sobre Migración y Protección, por primera vez contamos con una base regional que reconoce a la migración como un desafío compartido y que establece compromisos hemisféricos para abordar sus causas, expandir las vías legales y trabajar juntos contra los traficantes de personas”, destacó.
Luego de reunirse con el gobernador de Chiapas, Rutilio Escandón, el embajador Salazar recordó que la muerte de 56 migrantes el 9 de diciembre de 2021 en Tuxtla Gutiérrez debe continuar siendo un llamado de alerta a romper las cadenas de tráfico de personas.
Los traficantes engañan a migrantes y los llevan a un corredor de muerte”.
Agregó que la declaración de ambos países que surgió del último encuentro entre los presidentes Biden y López Obrador permitirá profundizar los compromisos de la Declaración de Los Ángeles para alcanzar acciones inmediatas y coordinadas.
Al mismo tiempo se dará seguimiento al compromiso de establecer un grupo binacional para colaborar en vías de migración con fines laborales y la protección de los trabajadores, así como para convocar a un grupo de trabajo para abordar la migración infantil.
El gobierno del presidente Biden continuará trabajando con nuestros socios, así como con el sector privado en el sureste de México y Centroamérica para atender las causas fundamentales de la migración”, sostuvo.
PIDEN SALVAR A FAMILIAS DEL TALIBÁN
Musulmanes de la frontera entre California y Baja California piden ayuda de la cancillería mexicana para rescatar familias afganas que huyen del Talibán al cumplirse ayer jueves un año del retiro estadunidense de Afganistán.
La fundadora del primer refugio para migrantes musulmanes en México, Sonia García, del albergue Assabil en Tijuana, dijo a Excélsior que “quisiéramos proponer un acuerdo al canciller Marcelo Ebrard o a la cancillería para trabajar juntos para rescatar familias afganas”.
García, directora de la Fundación de Latinas Musulmanas de San Diego, explicó que de parte de la cancillería únicamente necesitan visas para que las familias que huyen vuelen a la Ciudad de México.
Si el gobierno de México nos quisiera ayudar a salvar vidas como medida humanitaria, nosotros nos hacemos cargo de los gastos, del traslado y el alojamiento en Tijuana, mientras las familias consiguen cruzar la frontera para solicitar asilo”, declaró García.
Nuestra prioridad es ayudar a madres solas con sus hijos, porque bajo el régimen del Talibán son quienes corren mayor peligro de muerte, especialmente las que son viudas porque a sus esposos los han matado por haber trabajado para el gobierno o para el gobierno estadunidense”, dijo.
Lamentó que en las últimas semanas “dos personas, una de ellas una madre de familia, han perdido la vida mientras aguardaban nuestra ayuda”.
La Fundación de Latinas Musulmanas podría traer a las familias a California, pero ese proceso requiere ayuda desde Estados Unidos de un abogado de migración en un trabajo que toma por lo menos ocho o nueve meses y no hay garantías de que las peticiones sean aceptadas.
Assabil, o bienvenido peregrino en árabe, fue inaugurado a mediados de junio y desde entonces el albergue ha conseguido que familias con unos 40 musulmanes crucen a Estados Unidos a seguir procesos de asilo con ayuda de la organización Border Angels.
García dijo que en las inmediaciones de Afganistán hay familias “que han esperado todo un año, desde que salieron las fuerzas estadunidenses y han vivido bajo una opresión terrible”, ya sea porque son mujeres o porque son familias con miembros que colaboraron con el gobierno anterior o las fuerzas estadunidenses”.
Las familias afganas que han cruzado la frontera desde Tijuana lograron huir a Paquistán y llegaron a México con visa humanitaria que la Cancillería otorgó.
