sábado, noviembre 23, 2024

Sueñan con nuevos horizontes en el Festival de arte y luz Noor Riyadh

Arabia Saudita se convertirá en la galería de arte abierta más grande del mundo

Agencia Excélsior/RIAD, Arabia Saudita.

Aun cuando Estados Unidos reveló que Irán planearía un ataque contra los Emiratos Árabes Unidos o Arabia Saudita, en la capital de este último país la vida transcurre visiblemente normal y preparándose para su mayor apuesta cultural de los últimos años: el Festival de arte y luz Noor Riyadh.

Inaugurado el año pasado enmedio de la crisis por la pandemia, hoy iniciará su segunda edición, ahora bajo el lema ‘Soñamos nuevos horizontes’.

El encuentro internacional pretende convertir a esta ciudad en la más grande galería de arte abierta en el orbe.

Así es como Riad, en medio del desierto y del reino saudita, hace frente a los aventajados polos de atracción de la región, como Catar y los Emiratos Árabes Unidos, con sus pujantes Doha, y Dubái y Abu Dhabi, respectivamente.

Son más de 130 artistas y casi 200 obras de arte e instalaciones públicas de gran formato que estarán tres semanas, así como una exposición que permanecerá durante tres meses.

Excélsior tuvo acceso a un recorrido previo a la inauguración de la exposición, titulada From Spark to Spirit, la cual está montada en el distrito Jax, un área industrial con más de 100 almacenes que se ha transformado en un ala de Riad para estudios de artistas y espacios de exhibición.

La muestra tiene un par de obras que más allá de la luz juegan con los colores, sus gamas y la abstracción.

En la medida que el visitante se adentra en ella, encuentra piezas más interactivas e inmersivas.

Para ello no se tiene que echar mano de la tecnología de punta, muestra el saudí Moath Alofi, quien con un poco de agua y luz recrea un volcán en erupción.

Una de las piezas donde el público se detiene más tiempo, toma el dispositivo móvil y repite tomas y selfies, es en Machine Dreams, del turco-americano Refik Anadol.

Es una instalación basada en imágenes de Riad extraídas de redes sociales y archivos digitales. A través del aprendizaje automático, la inteligencia artificial procesa el universo de datos de la capital saudí.

Hay también piezas minimalistas, como Hidden Order, del colectivo inglés United Visual Artists, que parte de la arquitectura del universo y la geometría sagrada.

La exposición emplea una pieza acorde con las directrices del Ministerio de Cultura saudí: abrir la cultura árabe a otros mundos.

Por eso no es casual la obra del estadunidense Doug Aitken comisionada para este encuentro: The River consta de tres figuras humanas paradas en un no lugar que bien podría ser el desierto, mirando hacia un punto central. Si bien se advierte que son una mujer y dos hombres, las figuras están desprovistas de identidad, región y definición. Lo que sí es explícito de estas formas son la luz, el movimiento y la energía.