Los dos clasificados del Grupo B se conocerán en la última jornada, Inglaterra se perfila como uno de los ‘afortunados’, EU e Irán los candidatos al segundo; Gales por la sorpresa
Agencia Excélsior
Estados Unidos deberá ‘jugarse la vida’ ante Irán en la última jornada de la fase de grupos luego de dos buenos partidos ante Inglaterra y Gales, sin embargo, les hizo falta concretar las claras jugadas que construyeron en ambos compromisos; Inglaterra tiene prácticamente asegurado su boleto a octavos.
Por la buena cara presentada en su debut, Estados Unidos e Inglaterra repitieron el once titular. Los ingleses fueron los encargados de mover el balón desde el centro del campo, no sin antes arrodillarse en forma de protesta ante las ‘injusticias’ sociales que han hecho eco en Qatar durante el Mundial.
La primer llegada de peligro se presentó por parte de Harry Kane en el minuto 10 ante el arco del cancerbero estadunidense Matt Turner; el protagonista de que no hubiera peligro en la meta norteamericana fue Walker Zimmerman, quien utilizó su cuerpo como muralla para no dejar pasar el balón.
Conforme pasaban los minutos, Estados Unidos tomó confianza en la cancha del Al Bayt y al 25’ Weston McKennie perdió la primer oportunidad de verdadero peligro para las ‘barras y las estrellas’ ya que estando a la altura del manchón penal y sin marca alguna, envió su disparo a las tribunas del estadio.
La presión no cesó por parte de Estados Unidos y minutos más tarde (32’) Pulisic estrelló su disparo de pierna izquierda en el travesaño, misma que representaría la jugada más peligrosa para los dirigidos por Gregg Berhalter.
En los minutos finales de la primera mitad, Matt Turner se vistió de héroe para los norteamericanos, primero, al salir de manera adecuada ante un centro que iba directo a la cabeza de Rashford y, luego, respondiendo ante la exigencia de Mason Mount, quien obligó a Turner a estirarse cuan largo es para desviar el esférico.