La decisión de la Corte fue duramente criticada por el presidente López Obrador quien la calificó como una ‘vergüenza’, una ‘caricatura’, ‘leguleya’, ‘lamentable’ y ‘de pena ajena’.
Agencia Excélsior
La decisión de la Suprema Corte de Justicia de la Nación de que los delitos fiscales no sean considerados como delitos graves que requieran de prisión preventiva oficiosa (PPO) fue duramente criticada por el presidente Andrés Manuel López Obrador, quien la calificó como una «vergüenza», una «caricatura», «leguleya», «lamentable» y «de pena ajena».
El jueves, la Corte definió, en votación dividida que los delitos en que se contempla la evasión fiscal y la emisión de facturas falsas, no sean considerados dentro del catálogo de delitos que requieran de PPO.
«Es muy lamentable, es una vergüenza eso, con todo respeto, imagínense, los ministros protegiendo a defraudadores fiscales y a factureros.
«Aunque digan lo que digan, es proteger a los de arriba, a los potentados, a la delincuencia de cuello blanco. Ayer fue un mal día para el Poder Judicial, ayer sí ‘suprema corte del derecho’, si acaso, no de la justicia», recalcó el presidente.
Recalcó que la decisión de la Corte protege a quienes tienen más recursos para crear un sistema de evasión fiscal en operaciones con grandes cantidades de recursos, y que cuentan con el respaldo económico para pagar despachos de abogados y contadores especializados en temas fiscales.
Hizo hincapié en que las ministras Loretta Ortiz, y Margarita Ríos Farjat, fueron las únicas que insistieron en castigar con PPO a presuntos responsables de delitos fiscales.
«Dos mujeres fueron las que votaron, dos o tres mujeres, todos los demás, como empleados de los ‘machuchones’.
«Lamentable, de pena ajena, y ahora si hay un fraude se tiene que justificar la prisión preventiva. Imagínense a un juez buscando cómo justificar. Nada, una actitud leguleya, ni siquiera apegada a la legalidad, una caricatura de estado de derecho», reiteró el presidente.
Insistió en que la decisión de la Corte otorga impunidad a delincuentes «de cuello blanco».
