Agencia Excélsior
A trece años del lanzamiento de la primera tableta, en México su adopción ha sido limitada derivado del poder adquisitivo de la población y a la percepción de que tiene menor relevancia como eslabón esencial para acceder a la conectividad, según análisis de The Competitive Intelligece Unit.
De esta forma, pese a que la tablet registra una evolución en sus capacidades y características, la adopción en nuestro país es de 26.4%, equivalente a una contabilidad de 31.8 millones de dispositivos en activo en manos de personas de cinco años o más.
El 42.5% de los no usuarios reportan su consideración de “no necesitarlas” en su quehacer diario.
Sin embargo, entre quienes poseen una tableta se ha expandido su preferencia para jugar, según lo manifiesta un 55.2% del total de usuarios, así como para realizar búsquedas de información el 42.5% e incluso para llevar a cabo actividades escolares el 41.4% y para el aspecto laboral el 35.6 por ciento.
En contraste, teléfonos inteligentes de gama media y alta registran una elevada tenencia en el país y se consolidan como el principal eje de acceso y aprovechamiento de las herramientas y aplicaciones disponibles en internet.
Según las encuestas del organismo, otras razones relevantes están relacionadas el costo de las tabletas/el gasto “innecesario” que representa su adquisición indica el 22.5% del total de los no usuarios, así como la falta de habilidades digitales/el desconocimiento de cómo utilizarlas reporta el 14.4 por ciento.
En tanto que 9.5% del total de los no usuarios prefieren utilizar un celular y/o computadora. En tanto, el poder adquisitivo se ha vuelto especialmente importante ante el complejo escenario económico, a partir de la crisis de la pospandemia.
