viernes, noviembre 29, 2024

Marcelo Ebrard: el político conciliador de la causa morenista

Sus credenciales lo muestran como alguien sumamente preparado en el servicio público; anunció que en el 2030 volverá a competir por la Presidencia

Agencia Excélsior

Tiene 64 años, 41 de ellos al frente de distintas comisiones y encargos en el servicio público que le han enseñado los sabores y sinsabores de la política.

Sus credenciales lo muestran como alguien con gran preparación personal, académica y de servicio público para llegar a competir por la Presidencia de la República y ganarla. Sin embargo, dos veces se ha quedado a la orilla de abanderar a las izquierdas.

En 2011, cedió paso a Andrés Manuel López Obrador para el proceso electoral del año siguiente, tras una encuesta cerrada; en 2023, quedó detrás de Claudia Sheinbaum en una contienda polémica.

Ha dicho que volverá a competir en 2030, por tercera ocasión, historia similar con la de Andrés Manuel López Obrador y Cuauhtémoc Cárdenas.

Hoy es candidato al Senado de la República y en la campaña de la Coalición Sigamos Haciendo Historia, coordinador de vinculación con Organizaciones Civiles y Mexicanos en el Exterior, desde donde influirá con su amplio conocimiento de la política exterior.

Desde ahora se podría anticipar que sería el encargado de la revisión del TMEC en 2026.

El excanciller ha estado presente en la historia del México contemporáneo en su política y en sus situaciones. Participó en 1982 en la Secretaría de Programación y Presupuesto del gobierno de Miguel de la Madrid junto a quien considera su mentor, Manuel Camacho Solís. Más tarde apoyó a los damnificados del sismo de 1985 a través del Programa de Renovación de Vivienda Popular, y luego llevó las negociaciones de paz con el EZLN en 1994.

Después fue secretario general de Gobierno del entonces Departamento del Distrito Federal.

En 1995, luego de que Manuel Camacho Solís renunció al PRI, Ebrard le siguió el paso y un año después, en 1996, regresó a la política como diputado federal con el Verde Ecologista.

En 1998 formó —siempre de la mano de Camacho
Solís— el Partido de Centro Democrático (PCD), del que fue secretario general y candidato a jefe de gobierno del DF, aunque decidió declinar a favor de López Obrador en el año 2000.

Ya en el cargo, López Obrador lo nombró secretario de Seguridad Pública y posteriormente, tras los hechos de Tláhuac, secretario de Desarrollo Social.

En 2006, Marcelo Ebrard se convirtió en jefe de Gobierno desde donde generó una serie de programas de avanzada en la ciudad que lo llevaron a lograr en 2010 el título de Mejor Alcalde del Mundo que le otorgó la organización City Mayors y designado como presidente de la red global de Ciudades Seguras por parte de la ONU-Hábitat.

Se considera un hombre honesto y resuelto en la política, trabajador y con resultados en cada uno de los cargos públicos que ha asumido desde sus 22 años de edad a la fecha.

Estudió en el Colegio de México la carrera de Relaciones Internacionales de la cual se tituló en 1984 con la tesis Congreso y Democracia en México. Además cuenta con estudios en Administración Pública en el École Nationale d’Administration de París, Francia. Habla español, francés e inglés.

Ebrard es el segundo hijo de ocho del matrimonio entre Marcelo Ebrard Maure y Marcela Casaubon. Ambos finados.

Su educación básica la cursó en el Colegio Simón Bolívar, mientras que la preparatoria la hizo en la Universidad La Salle.

En el terreno personal, Ebrard se ha casado en tres ocasiones. La primera de ellas en 1987 con Francesca Ramos Morán, antigua compañera de la universidad con quien procreó a tres hijos: Anne Dominique, Marcelo y Francesca Ebrard Ramos.

De Francesca se divorció en 2005 aunque mantienen una buena relación. De hecho, ella fue titular de la Coordinación de Relaciones Exteriores durante la jefatura de Gobierno.

Su segundo matrimonio fue con la actriz Mariagna Prats que sólo duró 5 años debido a desavenencias lo cual concluyó con la firma del divorcio en 2011.

En su libro El Camino de México, publicado en la víspera de su campaña por la candidatura presidencial en marzo del año pasado, dedicó un espacio a su esposa Rosalinda Bueso, casado con ella desde 2011 y con quien tiene dos mellizos: Ivanna y Julián, de 10 años.

Sin embargo, su libro no le ayudó a obtener la candidatura presidencial, pero le atrajo ganancias importantes por la cantidad de ejemplares que vendió entre sus miles de seguidores que le apostaron a su campaña.

En el capítulo Mi Ahora, el secretario Ebrard narra la llegada a lo que fue su más reciente encargo, la Secretaría de Relaciones Exteriores donde transitó el momento de mayor tensión con el gobierno de Estados Unidos cuando en 2019 el expresidente Donald Trump amenazó con imponer aranceles.

También, cuenta la estrategia de nuestro país para atender la pandemia de covid-19 y la gestión para traer más de 250 millones de vacunas para la población. De igual forma, la reciente demanda contra fabricantes de armas en EU, causantes en parte por su comercio negligente de la violencia en México.

El excanciller comparte en Lo que Sigue su intención de lograr la candidatura presidencial en 2024 —y próximamente ha asegurado en 2030— y en este camino su idea de expandir la clase media lo que favorecerá el crecimiento económico.

“Tengo la capacidad y la experiencia que ningún otro político posee para aprovechar la enorme oportunidad que hoy se presenta en nuestro horizonte”, expresó el colaborador de Claudia Sheinbaum.