Luego de un año de la aprobación de los 12 días continuos de vacaciones sólo el 11% de los colaboradores los aprovecha.
Agencia Excélsior
A más de un año de aprobada la reforma a la Ley Federal del Trabajo (LFT), que garantiza a los mexicanos 12 días continuos de vacaciones a partir de su primer año laboral, éstos no son aprovechados.
De acuerdo con una encuesta de Pluxee, expertos en beneficios e incentivos, sólo 11% de los colaboradores aprovecha sus 12 días de descanso, mientras que 44% toma de cuatro a siete días.
Otro hallazgo reveló que 18% de los mexicanos toma menos de cuatro días de vacaciones y 9.0% no suele utilizarlas. En un rango intermedio, pero también con bajo porcentaje, se encuentran aquellos que toman de cuatro a 12 días, con 19 por ciento.
La Organización Mundial de la Salud (OMS), a través de diversos informes, ha establecido una correlación entre las largas jornadas laborales y los riesgos en el bienestar, estos informes también sostienen que trabajar 55 horas o más horas a la semana aumenta 35% el riesgo de presentar un accidente cerebrovascular si no hay descanso de por medio.
LA SALUD
Las vacaciones, además de ser un derecho laboral, toman máxima relevancia al impactar directamente en la salud y desempeño de los trabajadores.
Estudios sobre el Panorama Laboral en México revelan que 51% de los trabajadores afirma sentirse con poca energía; 49% menciona tener poco equilibrio laboral; y otro 43% considera que tiene una carga excesiva.
Dichas referencias visibilizan la importancia de tomar descansos y periodos vacacionales.
Por otra parte, al retomar información de la encuesta, 97% de las personas coincidió en la relevancia de la importancia de tomar vacaciones, ya que les brinda un mayor bienestar, sólo 3% acotó que no ve un beneficio en ello.
El 76% señaló que este tiempo de descanso les proporciona una mejor salud física y mental.
Pero ¿por qué los mexicanos prefieren trabajar en lugar de descansar? “Atribuimos este hecho a una responsabilidad compartida entre las empresas y los colaboradores, ya que, aunque en ambos casos están conscientes de los beneficios, las empresas podrían no incentivar lo suficiente a que los trabajadores tomen sus vacaciones y, por el otro lado, a ellos les resulta problemático delegar”.