Mientras en 2016 la tasa fue de 4.6 por cada 100 mil habitantes, para 2023 se estimó en 7.9, de acuerdo con datos del Secretariado de Seguridad Pública; BCS, Edomex y Zacatecas, con los más altos niveles
Agencia Excélsior
De acuerdo con los datos del Inegi, la extorsión es uno de los delitos que en menor medida se denuncia en el país. No sólo se trata de un crimen de difícil persecución, pues se realiza mayoritariamente por teléfono, o cada vez más a través de redes sociales, sino también porque se carece de una adecuada política de prevención, persecución y acompañamiento a las víctimas por parte de las autoridades de las entidades, pero también del gobierno de la República.
TASAS CRECIENTES
El Secretariado Ejecutivo del Sistema Nacional de Seguridad Pública dispone de estimaciones respecto de la tasa de delitos cometidos en el país, entre los que se encuentra el de la extorsión, cuyo crecimiento desde el 2015 ha sido constante. En efecto, la tasa de la comisión de este delito por cada 100 mil habitantes fue de 4.9. Sin embargo, debe recordarse que, según los datos de la cifra negra, no se denuncian 97 de cada 100 de este tipo de delitos, por lo que el subregistro es enorme.
Para el año 2016 la tasa fue de 4.6 por cada 100 mil; creció a 4.9 en el 2017; a 5.3 en 2018; a 6.9 en 2019; descendió ligeramente a 6.2 en el 2020; creció nuevamente a 6.8 en 2021; llegó a 8 casos por cada 100 mil habitantes en el 2022, manteniéndose prácticamente en el mismo nivel en 2023, cuando se estimó en 7.9 casos por cada 100 mil personas. Hasta el mes de agosto de 2024, la tasa acumulada era de 5.2 casos por cada 100 mil personas; es decir, una tasa que ya era similar a la del 2018, faltando aún el registro del último cuatrimestre del año.
Debe decirse que, según los datos comparables en el tiempo, entre los cuatro años que van del 2015 al 2018 la tasa promedio de extorsiones fue de 5 casos por cada 100 mil personas; pero para el periodo 2019-2023, la tasa promedio estimada por el gobierno federal fue de 6.8 casos por cada 100 mil habitantes en el país.
LOS ESTADOS CON PEORES INDICADORES
De acuerdo con los datos del Secretariado Ejecutivo del Sistema Nacional de Seguridad Pública, las entidades que tienen los peores promedios de tasas de extorsión para el periodo 2015-2024 son: Baja California Sur, con un dato de 16.5 casos por cada 100 mil habitantes; Estado de México, con 14.7; Zacatecas, 14.5; Colima, con 10.8; Nuevo León, con 10.2; Jalisco, 7.7; Veracruz, 7.5; Morelos, Tabasco y Quintana Roo, 6.9 casos por cada 100 mil personas, y Aguascalientes, con una tasa de 6.6.
GARANTÍA DE IMPUNIDAD
Según datos de la ENVIPE, 2024, levantada por el Inegi, en el año 2023 se estimó un total de 31.28 millones de delitos cometidos; sin embargo, no se denunciaron 29.066 millones, es decir, de los 85,698 delitos que se cometieron cada día, sólo se denunciaron 6,074 delitos diariamente.
Cabe mencionar que del total de delitos cometidos en el país, 4.9 millones corresponden a los casos de extorsión, es decir, esta tipología delictiva concentra el 15.66% de los delitos que se perpetran cotidianamente en México. Según los datos del Inegi, del total de delitos reportados, no se denunciaron 4.74 millones, lo que significa que la cifra negra en este rubro delictivo es de 96.7%, lo que la ubica, junto con la del fraude, como las dos formas delincuenciales que menos se denuncian y sancionan en el país.
EN ESTADOS DE DESGRACIA
De acuerdo con los datos del Secretariado Ejecutivo del SNSP, los estados de Baja California Sur, Estado de México, Zacatecas, Colima y Nuevo León son los que registran los peores indicadores en incidencia del delito de extorsión. Al respecto queda la duda de si se trata de entidades donde hay una mayor cantidad de denuncias, y como correlato, menor cifra negra; o bien si son aquellos donde realmente la incidencia es la mayor del país. En cualquier caso, se trata de una situación generalizada que genera pérdidas multimillonarias para la población, generalmente la más vulnerable, por la ignorancia y desinformación, ante este tipo de crímenes.
CONSINTIENDO A LOS CRIMINALES
La extorsión es un delito cometido principalmente por grupos de delincuencia organizada que tienen la capacidad de obtener bases de datos y que cuentan con infraestructuras muy importantes para realizar llamadas telefónicas, para “hackear” teléfonos celulares; o bien para suplantar o robar identidades en redes sociales. Las autoridades, siempre varios pasos atrás de los delincuentes, no han atinado a generar una adecuada política de prevención, investigación y sanción de este delito, por lo que, en los últimos años, es quizás el de mayor crecimiento en el número de víctimas y en la magnitud de ganancias ilegales obtenidas, pues la reparación del daño es prácticamente imposible.
