El sacerdote indígena tsotsil fue llevado a su última morada en San Andrés Larráinzar, Chiapas; acuden religiosos como Raúl Vera López
Agencia Excélsior
Con gritos de ¡Viva el padre Marcelo! ¡Viva el padre Marcelo! ¡Marcelo, amigo, el pueblo está contigo! ¡Viva la paz! ¡Viva la Paz! ¡Fuera cárteles, fuera cárteles!, y ¡el pueblo unido jamás será vencido!, cerca de 3 mil fieles despidieron al párroco Marcelo Pérez en su último adiós en este municipio.
La muchedumbre acompañó hasta su la última morada al sacerdote, su tumba estará en el patio de la iglesia de San Andrés. Los llantos y los gritos de justicia también se escucharon al momento de llevar el féretro a cuestas hacia el patio. ¡Viva Cristo Rey!, ¡viva Cristo!, clamaban.
Unos tres mil católicos acudieron a la segunda misa de cuerpo presente, todos integrantes del pueblo creyente. Ahí señalaron que el párroco denunció la violencia y las amenazas que sufría desde 2015 y se agudizó en 2021, tras la aparición del grupo El Machete en Pante-
lhó y los rivales Los Herreras.
Rodeado de indígenas tsotsiles, en el féretro del cura descansaba una túnica blanca y una estola roja, el olor de las flores blancas y del incensio embargaba el lugar que ocupaban los sacerdotes participantes de la santa misa, en honor a su compañero caído.
En el templete estaban el obispo Raúl Vera López y un séquito de presbíteros para la celebración de la eucaristía.
Vera López condenó el atentado.
Lo recordó como una persona que cuidaba a los más vulnerables.
El padre Marcelo cuidaba de los más pobres y los cuidaba de la gente abusiva, de la gente poderosa, de la gente que se siente dueña de la sociedad y de la tierra y no le importa dañar la vida de su prójimo para enriquecerse o para adquirir mayor poder político para adquirir todo lo que ellos quieren, y es la consecuencia que él pagó: su lucha por la justicia”.
El trabajo pastoral del Marcelo Pérez Pérez no les gustó a muchos, ayudó a muchas personas sin importarle si eran agradecidas o no.
Romeo Pérez Pérez, hermano de Marcelo, afirmó que los indígenas se encuentran desprotegidos e ignorados. “Mientras haya corrupción no habrá justicia. No tenemos dinero para un abogado.
No es cierto que haya una Cuarta Transformación mientras no haya justicia para los indígenas, no ha llegado la Cuarta Transformación”
A los más indefensos, a los más desprotegidos a los que no tienen dinero para pagar un abogado, mi hermano los defendía, pero lamentablemente le quitaron la vida”, dijo.
Como él hacia el bien a mucha gente, no les gustó”, sostuvo.
Asimismo, la Fiscalía General del Estado informó que fue detenido Édgar “N”, alias El Calimba, como uno de los autores materiales del homicidio del sacerdote registrado en el barrio de Cuxtitali, del municipio de San Cristóbal de las Casas, el pasado domingo. En tanto, las investigaciones las atrajo la Fiscalía General de la República.
Agrupaciones como Las Abejas, Movedite y Sacerdotes que forman parte de la provincia de Chiapas de las tres diócesis consideran que la muerte de Marcelo Pérez permitirá dar un vuelco a la situación de violencia en Chiapas.